¡Hellooooo! Ya estamos a vierneeeesss. Y una vez más... Se jodió el invento. Mi churri trabaja hoy todo el día así que tampoco lo veré este finde :( ¡Qué duro es esto de las relaciones a distancia! A ver si pasa rápido esta semana y me reúno con él el 24 y ya no lo suelto hasta el 6 de Enero.
En fin, al menos puedo empaparme de los momentos geniales que vivimos en las vacaciones y que os sigo enseñando en el post de hoy (tranquilas que ya queda menos jajaja).
El 28 de Septiembre, en mitad de nuestras vacaciones, cumplimos un año juntos. Y, aunque la lluvia nos fastidió un poco los planes, fué un dia genial.
Al despertar por la mañana me encontré un regalito entre las sábanas.
Y con éste monísimo collar en mi cuello nos dirigimos a l' Escala a visitar les Ruines d' Empúries.
Me pareció increíble que, después de tantos años, algunos de los mosaicos estaban prácticamente intactos.
Como veis el sol no nos acompañó ese día, de hecho se puso a llover casi al final de la visita, cosa que también agradecí porque llevábamos más de 3 horas allí (no es que no me guste culturizarme pero empezaba a refrescar y teníamos hambre jaja).
Empezó a llover a mares y eran ya las 3 de la tarde, así que nos costó encontrar sitio para comer. Finalmente nos dieron mesa en una brasería, estaba llena hasta los topes y nos sentaron en la terraza. Y aunque el lugar, por la pinta, no era de nuestro agrado, tengo que admitir que comimos de maravilla. Estaba todo buenísimo, nos atendieron bien y no nos costó muy caro. Así que valió la pena.
Pero la lluvia no cesaba y no tuvimos más remedio que irnos al hotel (aunque tampoco era mala idea, era nuestro aniversario jajaja)
Y por la noche salimos a celebrarlo a lo grande. Pero eso en el próximo post.
Que tengáis un feliz finde.
Besos
